De la Hiperinflación a la adopción cripto: El auge de Bitcoin y las stablecoins en Venezuela

La relación entre el pueblo venezolano y el sector cripto es, en definitiva, superadora. El país sudamericano lleva varias décadas inmerso en notables problemas políticos, económicos y sociales, pero fue entre los años 2015 y 2018 cuando tocó su punto más bajo. Para que se hagan una idea: la nación caribeña cerró 2018 con una hiperinflación de 130.060%, y en aquel entonces ya había cifras que corroboraban una brutal contracción de la economía… Casi 48% entre 2013 y 2018. Como es lógico, esta crisis rompió con todo ápice de confianza entre la gente común y su moneda nacional –la cual llegó a presumir de varias décadas de estabilidad en el Siglo XX-, empujando a los ciudadanos a buscar otras reservas de valor.

El hecho de que muchos venezolanos optaran por el dólar estadounidense no es novedoso, pero fue durante 2016-2018 cuando las cripto empezaron a ganar popularidad en el país. La gente comenzó a escuchar sobre Bitcoin, esa “moneda digital” que, incluso tras múltiples episodios de volatilidad, seguía contando con la confianza de miles de personas. Los criptoactivos llegaron para permanecer en suelo venezolano y compartir espacio con el dólar de Estados Unidos, el cual, desde 2020, comenzó a ganar aún más protagonismo del que ya tenía; de hecho, hoy en día, casi todos los precios expresados en Venezuela son en dólares.

El problema, claro está, son los costos de vida tan altos en relación a lo poco que gana el grueso de la población –típico en una nación en la que difícilmente algún extranjero se acerque a invertir-. El país sigue presentando desbalances bastante serios tanto en la macro como en la microeconomía, sin mencionar que las personas de a pie no tienen acceso a servicios públicos de calidad.

Pero no perdamos el foco. Es cierto que todavía queda camino por recorrer, que el principal medio de ahorro de la población venezolana son los dólares y que no es sencillo encontrar en el país empresas de alta envergadura, como supermercados y marcas de ropa, dispuestas a aceptar criptomonedas, pero sí que se han logrado avances en lo que respecta a marcar las vidas de la gente común. En Venezuela, hoy no es complicado encontrar pequeños y medianos negocios que acepten Bitcoin y stablecoins –especialmente USDT-, al igual que no es nada difícil integrarse en el mercado cripto; es decir, conseguir quien te venda criptomonedas o quien desee comprar las que están en tu poder. 

Según los datos de SimilarWeb, plataforma de análisis de tráfico web y marketing digital, en marzo de este año Venezuela se posicionó como el segundo país que más tráfico aportó a la página web del P2P de Binance, con nada menos que 478 mil visitas –esto representó el 7,98% del flujo de visitas a la web-. Argentina, otra nación que en los últimos años ha atravesado una grave crisis inflacionaria –la cual, para el momento de redactar este artículo, parece estar llegando a su fin-, fue el territorio que contribuyó con más usuarios: aproximadamente 1.130.000 personas –el 18,98%-. En total, Binance recibió 6 millones de visitas en marzo, aunque es necesario matizar que los datos de personas que utilizan la app del servicio no son tomados en consideración; es decir, únicamente el tráfico desde smartphones y computadoras.     

Al compartir problemas económicos de gran magnitud, no es de extrañar que Argentina y Venezuela sean protagonistas en indicadores relacionados con el mercado cripto de Sudamérica –aunque la crisis que llegó a tener Venezuela fue mucho más pronunciada-; de hecho, en octubre de 2023, Chainalysis publicó su respectivo informe sobre adopción de criptomonedas, destacando que, a pesar de que Latinoamérica tiene un mercado más pequeño al de otras regiones, como el oriente de Asia o el este de Europa, la adopción base es fuerte y hay 3 países a tener muy en cuenta: Brasil –en aquel entonces 9na posición-, y el dúo formado por Argentina y México –puestos 15 y 16 respectivamente-. No obstante, Chainalysis hizo una mención especial al caso de Venezuela, remarcando que un impresionante 92,5% de la actividad cripto pasa por exchanges centralizados… Binance tiene un dominio indiscutible en el país. 

“Desde 2014 se ha producido un éxodo masivo en mi país debido a una emergencia humanitaria compleja. En los últimos diez años, alrededor del 25% de la población ha abandonado Venezuela.

Las criptomonedas han proporcionado una alternativa a los activistas por la democracia, las ONG y los luchadores por la libertad para superar la censura y el cierre del espacio cívico.

Venezuela ha tenido una de las peores tasas de hiperinflación de la historia, superior al millón por ciento. Las criptomonedas, en particular las stablecoins, han ayudado a muchas personas a superar los problemas económicos”.

–Leopoldo López opositor al gobierno de Venezuela.

Sobre la relación entre el gobierno venezolano y la industria cripto, esta ha pasado por distintas etapas. En 2018, el gobierno persiguió a los ciudadanos que se dedicaban a la minería y llevó a cabo allanamientos en instalaciones a lo largo de todo el país. No obstante, en enero de 2019, se emitió un decreto con las primeras medidas que buscaban regular el sector… Un año después se firmó un acuerdo entre SUNACRIP –una comisión que supervisaba las actividades cripto en el país- y Corpoelec –la principal empresa energética de Venezuela-, con miras al despliegue de políticas que permitieran el desarrollo de la minería cripto y la protección del sistema eléctrico del país caribeño.

Si bien el sector cripto gozó de relativa tranquilidad durante unos años, hace solo unas semanas trascendió el regreso de un enfoque represivo hacia los mineros, pese a que las autoridades no han publicado un decreto oficial exponiendo nuevas regulaciones… Ahora mismo, la situación está en el limbo. 

Datos interesantes sobre la adopción cripto en Venezuela:

• A mediados de 2022, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) publicó estadísticas de 2021, en las que se reflejaba, en términos porcentuales, que Venezuela era el tercer país del mundo con mayor adopción de criptoactivos: 1 de cada 10 venezolanos (10,3%) poseía criptomonedas –el país caribeño cuenta con una población de poco más de 28 millones de habitantes-. Según los datos del organismo, Venezuela era sólo superada por Ucrania (12,7%) y Rusia (11,9%).
• Pese al dominio indiscutible de Binance en el mercado venezolano, Orinoco es otra de las alternativas para comprar BTC utilizando bolívares. Se trata de una plataforma Web3 que posee su propio token, NECTAR, el cual debe adquirirse para posteriormente ser convertido a BTC, USDT, EOS, HIVE o cualquiera de los tokens con los que opera el ecosistema. Orinoco también es utilizado para hacer transferencias entre bancos de Estados Unidos a través de Zelle. 
• A mediados de mayo, en un evento realizado en Caracas que reunió a importantes figuras del sector cripto en Latinoamérica, trascendió el lanzamiento de la primera revista física sobre criptomonedas en Venezuela: BTC Techno Magazine. Hablamos de un proyecto creado por Aníbal Garrido y Editza Oliveros, quienes han formado un equipo de redactores de distintas nacionalidades –destacan Estados Unidos, Venezuela, Argentina y México-. La iniciativa –digital e impresa- se encarga de publicar análisis y entrevistas.     

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